domingo, 31 de octubre de 2010

Entre dos universos...

La ilusión siempre, siempre termina muerta en algún rincón, no importan las copas que te llevaras a la boca, no hay manera de evitarlo. Después de siglos descubro que no tengo donde dormir, estuve vagando tanto tiempo, recorriendo tantas lunas que me confundí de universo una vez más, y esta vez no fue culpa de la inconsciencia que me atrapa. Estoy en el medio del camino, y no puedo avanzar...cuántos universos crees que puedo habitar?

Conozco la libertad, y no hizo más que esclavizarme, ahora ando divagando por la 34, yendo y viniendo, por allá no tengo más nada que hacer...
Supe que te amaba cuando tus ojos me condenaron a esto. Vos sabés lo que siento, y es que me cuesta callar lo que siento, con mucho esfuerzo puedo dominar algunas emociones, pero no lo que siento, y sin embargo, yo no sé si estas bien o mal, no puedo creer que es por mi culpa, será mi culpa? No entiendo la razón de andar sintiendo culpa...en fin...sabrás realmente lo que siento?

También pasa que ando interpretando mal las cosas, y qué es cosa? bueno, pues por estos lados, por este universo que me deshabita cada tanto, cosa es casi todo. Por ejemplo, tu mirada, tu perfume me confunde, más, ahora odio tu perfume. Será que ando tan privada de caricias que el mundo real es un abismo de incoherencias. Estaba tan tranquila, tan en equilibrio con mis cosas, mis cosas son tantas que no puedo enumerarlas, pero andaba bien, y ahora mis universos se fundieron, no descubro la verdad porque no quiero, me amarga la luz, me entumece tu mirada, estoy realmente a la deriva entre dos universos, uno que habita en tus ojos, el otro que llena los míos de lágrimas. Quisiera acabar con esta historia, pero siempre contigo en mis brazos, pero la historia no terminará así, la historia no termina...

Ahora, ahora estoy a oscuras, maltratando mis ojos, y mis pulmones, no quiero luz, la oscuridad me relaja por estos días, es como si hubiera estado en penumbras hace siglos, y ahora que todo es oscuro, me reencuentro conmigo. Tantas cosas podría decir, y nada justificaría mi existencia, en silencio es cuando escucho a mi alma, en silencio y a oscuras, para destrabar las respuestas que necesito.
A mitad de camino, camino, a veces y siempre que el miedo irrumpe en mi sendero, corro, y a veces también por cobardía...
Por cada hora, una caricia...entre los universos no hay tiempo, todo está en pausa...y vos? Vos, Amor, dónde estás?

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