Si me vas a mentir que sea mirándome a los ojos. De poder elegir, preferiría que no lo hicieras. Son demasiadas mis nubes y demasiados mis miedo, no quiero vivir pensando que podrías mentirme a mis espaldas. Imagino que razones tendrás de sobra, como a mi me sobra locura, lo sé, no creas que por no hablar no tengo cosas para decir, ni creas que por callar no te estoy diciendo nada. Seguro te sobran motivos, como a Serrat y Sabina, pero a mi me faltas tú. Me falta tu aroma en las sombras de este universo de palabras y ni hablar de este laberinto de calles marchitas que me rodea. Las pastillas ya no me ayudan a dormir, amor, y es tan precaria mi paciencia. Y como si no fuera cierto, aún busco la frontera entre fantasía y realidad, el tiempo me tira tu ausencia en la cara, una cachetada en la nuca y me obligan a fingir. Pero tú, mi vida, si elijes mentirme, que sea mirándome a los ojos...Ya sé que no entiendes nada, no hace falta, me faltas tú...
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