Déjame

¿Por qué huir del silencio cuando me miras? No entiendo a la gente que no entiende el silencio. Hay más en el silencio que en las palabras. Mírame en silencio, como sólo los que aman pueden hacerlo, mírame y descubrirás todo, todo. ¿Por qué escaparse de una mirada que lo puede decir todo? No es necesario tanto alboroto, simplemente mírame en silencio, no huyas de mi silencio, sólo así sabrás todo lo que me llena y todo lo que me faltas...

Derramas mis suspiros, desparramas mis plegarias. Necesito tu silencio en mis labios, compartir un silencio nos hace menos vulnerables, ¿no crees? Podríamos fingir que la verdad es otra, podría fingir que el mundo es otro pero ya no tengo fuerzas para luchar, así de simple.

Siempre me pregunto lo mismo...Si al menos leyeras lo que siento en lugar de juzgarme por lo que hice, y ya que vienes a espiar mi falta de sueño, porque insomnio es otra cosa, ¿por qué no te quedas un rato y me lees las hojas que te dediqué? ¿por qué, simplemente no te quedas y me abrazas como si el mundo estuviera a punto de dejar de serlo? Si no puedes entender tanto silencio, ¿cómo podrías amarme? Si no puedes escuchar al silencio, ¿cómo podrías escuchar la única maldita verdad? Ya deja, por favor, deja de perseguirme...Me torturas con tus ojos de hierro. Deja de venir a ver cuánto te extraño para luego irte, sin siquiera dejarme un abrazo, aunque sea colgado de la ventana...Déjame, déjame olvidarte...déjame...¿cómo es posible que sigas aún, ahí, aletargado y profundamente ahí,  de donde parece que nadie puede sacarte? 

Déjame...